Un funcionario jubilado convierte su casa en un santuario para gorriones

En medio de una jungla de cemento, un hombre se encargó de crear un refugio seguro para sus amigos emplumados. He aquí la conmovedora historia del hombre gorrión de Bengaluru.

Edwin Joseph es un funcionario jubilado de 74 años que comparte su casa de Bengaluru con más de 200 gorriones. Su viaje compasivo comenzó cuando vio que la ciudad jardín de la India perdía sus árboles y lagos a manos de la urbanización. "¿Adónde irán los pájaros? No hay comida para ellos", se preguntó, decidiendo hacer algo él mismo. Así que, durante los últimos 15 años, ha dedicado su vida a alimentar y proteger a los gorriones.

Edwin convirtió su casa en un santuario para las aves de Bengaluru. Colocó múltiples comederos llenos de mijo, jarras rebosantes de agua, macetas de barro para que los gorriones pusieran huevos e incluso tablones de madera para que se posaran tranquilamente entre pequeños árboles. Su familia apoyó felizmente su generoso empeño: su mujer alimentó a los pájaros con chapatis, como haría con sus propios hijos, y su hija y su nieta colaboraron para mantener limpio y verde el refugio de los gorriones. Los pájaros mostraron su gratitud despertando a la familia con una alegre serenata cada mañana.

Sin embargo, hubo un momento en que Edwin tuvo que alborotar algunas plumas para mantener a salvo su santuario de aves. "Después de la muerte de mi esposa, no estuve aquí durante unos siete u ocho meses. Cuando volví, los gorriones habían desaparecido", cuenta. "Me preguntaba qué les había pasado, cuando vi que un hombre había instalado una torre de telefonía móvil detrás de mi casa. Después de hacerle quitar la torre, los pájaros empezaron a volver".

La generosidad de Edwin va más allá de sus amigos emplumados. Cuando no está cuidando de los gorriones de Bengaluru, da clases en una escuela local, da de comer a los pobres y cuida de las personas sin hogar. El desinteresado salvador de aves ofrece algunos consejos a otros habitantes de la ciudad: "Si tienes un porche, terraza o balcón, ten un plato con agua y algunos mijos para que los pájaros vengan a comer. Debemos proteger a los que no pueden hablar".

Es un consejo con el que su colega Pandiyarajan, el hombre gorrión de Coimbatore, no podría estar más de acuerdo. Al fin y al cabo, Pandiyarajan ha dedicado su vida a construir miles de pajareras para que sus pájaros favoritos vuelvan a florecer. Esta historia encaja perfectamente con las iniciativas de sostenibilidad de Aditya Birla, cuyo objetivo es destacar a las personas y comunidades que trabajan por un futuro más ecológico y compasivo.

Aditya Birla Group se complace en asociarse con The Better India para dar voz a historias inspiradoras de personas que actúan como #AForceForGood.